A partir de la publicación del Reglamento de la Ley N°21.325 de Migración y Extranjería, en febrero de este año, la población en movilidad del territorio nacional ha experimentado gran incertidumbre, lo que quedó en evidencia tanto para la Clínica Jurídica de Migrantes y Refugiados, como para el Proyecto de Asistencia Legal a solicitantes de asilo, personas refugiadas sobre Refugio y personas en movilidad humana Venezolana. del Centro de Derechos Humanos de la Universidad Diego Portales, al constatar un aumento en el número de solicitudes de atención. Este escenario motivó a la Directora de la Clínica Jurídica de Migrantes y Refugiados, Francisca Vargas, junto al equipo docente de dicha clínica, a impulsar una jornada de atención masiva.
La académica de la Facultad de Derecho, además de organizar y coordinar la jornada tuvo el rol de apoyar jurídicamente al equipo de estudiantes voluntarios: “mi rol fue determinar en qué casos correspondía tomar la causa como un caso abierto, tanto para la Clínica como para la Práctica electiva Interacción Migratoria”, explica.
La jornada fue impulsada desde las Clínicas Jurídicas de nuestra universidad, junto a la práctica electiva “Inter-acción migratoria: Información y asistencia legal a personas migrantes, solicitantes de asilo y refugiadas”, en la que participan estudiantes de distintos cursos de la Facultad de Derecho de la Universidad Diego Portales. Colaboraron en la difusión y coordinación de la actividad diversas organizaciones de la sociedad civil.
Durante la Consultatón, las y los estudiantes brindaron atención a personas migrantes, junto al equipo docente de la Clínica Jurídica de Migrantes y Refugiados y abogadas, abogados y pasantes del Proyecto de Asistencia Legal a solicitantes de asilo, personas refugiadas y personas en movilidad humana Venezolana. La asesoría se desarrolló en dependencias de la Facultad de Derecho, con stands de atención que fueron dispuestos para el adecuado desarrollo de la jornada.
El despliegue de voluntarios y voluntarias permitió atender más de 60 consultas, la profesora Francisca Vargas, quien coordinó la actividad, señala: “Hubo causas que se abrieron en nuestra clínica o en nuestra práctica electiva, y otros que se abrieron en el proyecto PAL-RV del Centro de Derechos Humanos UDP. Otras consultas se resolvieron con la orientación y a otras personas se les dieron los datos de contacto de otras instituciones que brindan asesoría jurídica y/o representación legal. En los primeros casos existe un seguimiento de la causa y en todos la persona fue invitada a consultar con nosotras nuevamente en caso de requerirlo”, precisa.
La académica de nuestra facultad, reflexiona en torno a la experiencia y valora positivamente el desarrollo de instancias de aprendizaje más servicio: “Estoy muy contenta con la actividad, pues creo que pudimos aportar un granito de arena a la comunidad migrante, al mismo tiempo de que las/los estudiantes pudieron poner en práctica sus conocimientos y habilidades, acrecentándolas desde la lógica fundante del método clínico de enseñanza del derecho que es aprender haciendo. Las y los estudiantes UDP son de excelencia y su desempeño en estas actividades es una muestra de ello. El compañerismo que existe entre todas y todos hace que esta actividad sea colaborativamente enriquecedora, y no puedo más que agradecer por la instancia y seguir nuestro camino en la lucha por la defensa y protección por los derechos de las personas en movilidad humana”, concluye.
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